Porteño nomás...así salió...así no fue...(II vez, se borró)

texto basado en un escrito anterior
(7 minutos antes, muerto por apretar culquiera, aniquilado cruelmente)

un delirio místico irrepetible...


Desapego total, por un sueño, dejado llevar
de personas que son nada,
de territorios y sangre que se pierden
aunque duelan los huesos
de recuerdos, un tajo de guarra
su turgencia wasa y singular
me hace reir y recordar
aquel momento del que ya no hay testigos
no murieron, estan
en los subtes, en los ríos
en la tele, en mi mente

Tantas imágenes y se mantiene
la carne sabe elegir
no como nosotros
malabareando simbolos, porque perdimos los sentidos, yo, otro, casos literales, o metafóricos, pero en sí...se desvanecieron imperterritos sin piedad
el artista sufre angustiado y yo no se lo que le pasa,
si comprendiera
no estoy tan denso pero perdí mi energía y mi fe en una aventura, una fuga, un tajo al corazón como ese que estaba contando
de la chica antigua, de la que no hay testigos, ella, si claro...que me pareció ver hace poco. Que nunca quise, había venido a sacarme con su mano fuerte y su curvatura hermosa. Seria voz, deseos potentes de salir de esa época que se fue entre las manos
para todos...
Un reflejo, sí, el otro día...
un recuerdo que me reverbera a mí, porque así quiere justificar mi fantasía la parábola loca, que enloquece sin vino, sin nada...

[Tengo que aclarar que el humo desordena esas chacras tranquilas, se tornan imperios llenos de estandartes egipcios y babilonicos]

Más alla
después de generar el rito de evacuación de la intrusión de la imaginación
para salir de esa locura dañina que al mismo tiempo
es el escudo !!!! claroooooooo!!! contra el desierto
se olvida la ninfa que ya no es, aunque sea
los ojos negros contradiciendo el pelo
(resucito el sentimiento
y no la forma...)
y murió en un vino ácido
en varias frases de libro


en proyecciones dislocadas en el techo, sagrado techo, y piso donde la vista perdedora se sostiene...

[en mi mente esos testigos, esos amigos que ya no son,
estoy lleno de lo mismo hace mucho tiempo
el fulgor es el nitrogeno que congela la alteridad inmutable
por eso cualquier distancia es en vano y cualquier cuchillazo
tambien]


las armas de vidrio
las rompen y se astillan
aunque sean fuertes, enormes tanques soberbios
y se ríen, se ríen de ellos
y de algunos de nosotros...

el se nubla en la cueva con aguarraz y colores, armas de madera
el otro dibuja con la luz y la radiacion, ve por el reflejo de los vidrios
y quiere traspasar las rejas, armas de vidrio

Y la locura, el escudo que permite fugar en el desierto...
te mata,
inmoviliza
envuelve.